Navegando la Compasión: Discerniendo Cuándo y Cómo Ayudar
sábado, 28 de octubre de 2023
Ayudar es tender una mano; dar sabiamente es extender una hoja de ruta.
Desconocido
Querido/a amigo/a,
Últimamente, he estado contemplando las diversas formas de pobreza que existen en el mundo. Algunos son pobres solo en días festivos, algunos son pobres una vez a la semana, algunos son pobres todo el tiempo; pero para todos, ser pobre está fuera de su control.
Esto me llevó a pensar: ¿Cómo discernimos la necesidad genuina de la falta de responsabilidad? ¿En qué momento ayudar se convierte en habilitar? Estas preguntas son fundamentales para comprender la mejor manera de ayudar a quienes nos rodean y lo necesitan.
En mi experiencia personal, involucrarme demasiado con algunos de nuestros beneficiarios que reciben alimentos y ayuda financiera sirvió como una llamada de atención. Es fácil caer en un lugar de querer darles todo, pero eso podría crear una dependencia poco saludable.
Es crucial recordar que nuestras propias capacidades son limitadas. Aunque somos prósperos y generosos hoy, podríamos encontrarnos en necesidad de ayuda mañana. Este equilibrio entre la autosuficiencia y la compasión, entre ofrecer ayuda y fomentar la independencia, es delicado de mantener.
En esta era, donde el ensimismamiento a menudo se defiende a través de las plataformas de redes sociales, debemos tener cuidado de no perder de vista nuestra responsabilidad con los demás. Nuestro objetivo final no debe ser solo la superación personal, sino también el empoderamiento de aquellos que carecen de la voz o los medios para pedir ayuda. Encontrar a estas víctimas silenciosas es nuestro deber más desafiante pero gratificante.
Así que, los que somos fuertes debemos soportar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos.
Romanos 15:1
Está escrito que el rey Salomón, incluso en su sabiduría y riqueza, procuró entender el sufrimiento del más pequeño entre sus súbditos. Puede que no todos tengamos los recursos o la sabiduría de Salomón, pero cada uno de nosotros puede elegir tender una mano, o mejor aún, una hoja de ruta, a los necesitados. Al apoyar a Visión para Israel mensualmente, usted nos permite ser tanto los ojos como las manos que elevan a los menos afortunados, con gracia y discernimiento.
Shalom y bendiciones,
Batya