Ahora más que nunca, los cristianos necesitan saber lo importante que es bendecir a la nación de Israel. Profundicemos en la palabra de Dios para descubrir más del corazón de Dios acerca de bendecir a Israel.
Nuestro Dios que Guarda los Pactos
¿Sabías que nuestro Dios es un Dios que hace y guarda pactos? Dios hizo pactos con Noé, Abraham, Isaac y Jacob. Después de que Dios inundara la tierra, hizo un pacto con Noé diciendo:
"Y me acordaré del pacto mío, que hay entre mí y vosotros y todo ser viviente de toda carne; y no habrá más diluvio de aguas para destruir toda carne. Estará el arco en las nubes, y lo veré, y me acordaré del pacto perpetuo entre Dios y todo ser viviente, con toda carne que hay sobre la tierra”. (Génesis 9:15-16)
Pasaron varios cientos de años y Dios fue fiel en guardar su pacto con Noé al multiplicar y aumentar las familias en la tierra. El siguiente pacto que Dios hizo fue con Abram:
"Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra". (Génesis 12:1-3)
Dios le estaba diciendo a Abram y a su esposa Sarai, quienes eran incapaces de concebir que tendrían hijos y que sus descendientes se convertirían en una gran nación. ¿Se imaginan la incredulidad contra la que lucharon Abram y Sarai? Dios le habló de nuevo a Abram y le dijo que haría que su descendencia fuera tan numerosa como las estrellas del cielo. ¿Y cuál fue la respuesta de Abram?... "Y creyó a Jehová, y le fue contado por justicia". (Génesis 15:6)
De la vida de Abram podemos aprender a creer lo que el Señor nos dice porque Dios nos lo contará por justicia. Por lo tanto, si Dios dice que bendecirá a los que bendicen a Israel, entonces también debemos creer al Señor en este asunto. ¡Elijamos creer que cuando bendecimos a Israel, Dios también nos bendecirá a nosotros!
Sin embargo, ya sabemos cómo se desenlaza esta historia. Pasaron muchos años, y Abram y Sarai se cansaron en la espera. Terminaron tomando el asunto en sus propias manos y desobedeciendo a Dios. Cuando Abram tenía 86 años, la sierva de Sarai, Agar, dio a luz a Ismael. Sin embargo, nuestro Dios, que guarda el pacto, fue misericordioso y fiel para cumplir su pacto. Y 14 años después, Dios le recordó a Abram el pacto que hizo con él:
"Era Abram de edad de noventa y nueve años, cuando le apareció Jehová y le dijo: Yo soy el Dios Todopoderoso; anda delante de mí y sé perfecto. Y pondré mi pacto entre mí y ti, y te multiplicaré en gran manera”. (Génesis 17:1-2)
Cuando Dios hizo pacto con Abram, también hizo pacto con Sarai. Por lo tanto, la promesa de Dios solo podía cumplirse a través de Abram y Sarai, y nadie más. A pesar de su desobediencia, Dios declaró que Su pacto todavía se cumpliría a través de Abram y Sarai. Dios cambió sus nombres, declaró que Abraham sería el padre de muchas naciones, declaró que Sara sería la madre de muchas naciones, y les prometió que el pacto se cumpliría a través de su hijo Isaac.
"Y no se llamará más tu nombre Abram,[a] sino que será tu nombre Abraham, porque te he puesto por padre de muchedumbre de gentes. Y te multiplicaré en gran manera, y haré naciones de ti, y reyes saldrán de ti. Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti. Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la tierra en que moras, toda la tierra de Canaán en heredad perpetua; y seré el Dios de ellos". (Génesis 17:5-8)
Dios estaba haciendo un pacto eterno con Abraham y Sara diciendo que no solo haría que sus descendientes fueran tan numerosos como las estrellas en el cielo, sino que también sería su Dios y les daría posesión de la tierra de Canaán.
Bendiciendo el Pacto entre Dios y Jacob
Dios fue fiel en guardar su pacto a través de Abraham, su hijo Isaac, y luego a través del hijo de Isaac, Jacob. Al final de su vida, Isaac bendijo a Jacob, diciendo: Sírvante pueblos, y naciones se inclinen a ti; Sé señor de tus hermanos, y se inclinen ante ti los hijos de tu madre. Malditos los que te maldijeren, y benditos los que te bendijeren”. (Génesis 27:29) Isaac bendijo a Jacob con el pacto que Dios hizo con Abraham y dijo:
"y te dé la bendición de Abraham, y a tu descendencia contigo, para que heredes la tierra en que moras, que Dios dio a Abraham". (Génesis 28:4)
Es fascinante ver este pacto del Señor siendo preservado de padre a hijo, vez tras vez a lo largo de muchas generaciones del pueblo judío. Es importante tomarse el tiempo para entender este pacto eterno que Dios hizo con el pueblo judío y cómo nos afecta a cada uno de nosotros hoy.
Bendecir a Israel Agrada al Señor
Ahora que sabemos lo que tenemos que hacer, es hora de descubrir por qué debemos bendecir a Israel. Echemos un vistazo a las interacciones entre Balac y Balaam en los capítulos 23 y 24 del libro de Números.
Balac estaba tratando de hacer que Balaam maldijera a Israel, pero cada vez que Balaam oraba, bendecía a Israel. Balaam entregó una palabra del Señor a Balac en Números 23:7-8 diciendo: "Y él tomó su parábola, y dijo: De Aram me trajo Balac, Rey de Moab, de los montes del oriente; Ven, maldíceme a Jacob, y ven, execra a Israel. ¿Por qué maldeciré yo al que Dios no maldijo? ¿Y por qué he de execrar al que Jehová no ha execrado?"
Varias veces Balac trató de hacer que Balaam maldijera a los israelitas, pero Balaam solo pudo decir lo que Dios quería que dijera, que era bendecir a Israel. Después de varias veces de orar y bendecir a Israel, Balaam se dio cuenta de que al Señor le agradaba bendecir al pueblo de Israel.
“Cuando vio Balaam que parecía bien a Jehová que él bendijese a Israel, no fue, como la primera y segunda vez, en busca de agüero, sino que puso su rostro hacia el desierto". - Números 24:1
Entonces, ¿por qué debemos bendecir a Israel? Una respuesta es que le agrada al Señor. Dios eligió hacer un pacto con el pueblo judío y quiere bendecirlos. Por lo tanto, si bendecimos a Israel, entonces Dios nos bendecirá. Sin embargo, si maldecimos a Israel, entonces recibiremos una maldición a cambio.
Consecuencias de Maldecir o Bendecir a Israel
"Benditos los que te bendijeren, y malditos los que te maldijeren".
Números 24:9
Otra razón importante para bendecir a Israel es porque hay consecuencias si elegimos no bendecir a Israel. Cuando alguien maldice a Israel, será maldecido a cambio. A partir del ejemplo de las interacciones de Balac y Balaam, también podemos ver esta verdad. Balac intentó que Balaam maldijera a Israel 3 en tres ocasiones distintas, y debido a esto Dios maldijo a Balac y a su pueblo.
También hemos visto una imagen muy clara de esto durante la Guerra de las Espadas de Hierro. Podemos ver la mano de Dios viniendo contra las naciones y el pueblo que maldicen a Israel. El 14 de diciembre de 2023, un legislador turco hablaba en el parlamento y criticaba a Israel. Tan pronto como terminó su discurso sobre Israel, instantáneamente tuvo un ataque al corazón y se desplomó en el escenario. Dos días después, murió.
Hay grandes bendiciones que vienen si elegimos bendecir a Israel, y hay terribles consecuencias que vienen si elegimos maldecir a Israel. Y ahora que hemos visto varios pasajes de la Biblia que explican esta verdad, ¡esperamos que todos se sientan animados no solo a bendecir a Israel, sino también a animar a otros a hacer lo mismo!
"¡Bendito seas, Israel! ¿Quién como tú, pueblo salvo por Jehová, Escudo de tu socorro, y espada de tu triunfo? Así que tus enemigos serán humillados, y tú hollarás sobre sus alturas". -Deuteronomio 33:29
¿Cómo Puede Usted Bendecir a Israel?
Ahora la pregunta es: '¿Cómo bendecimos a Israel?' Creemos que bendecir a Israel significa entender el corazón de Dios por esta nación y este pueblo, y obedecer lo que Dios pone en su corazón. Bendecir a Israel es como arrodillarnos y orar por esta nación, especialmente ahora, durante la guerra. Bendecir a Israel es como declarar verdad y vida sobre esta nación y este pueblo, especialmente cuando otros maldicen y expresan odio hacia Israel. Bendecir a Israel es como dar su tiempo, sus finanzas, su energía y su apoyo para mostrar amor a estas personas con las que Dios ha hecho un pacto eterno.
Con toda esta charla acerca de 'bendecir a Israel', pongámonos prácticos y pongamos esta verdad en acción.
A continuación hay algunas maneras prácticas en las que usted puede bendecir a Israel a través de VPI hoy:
1. Voluntariado — Si le gustaría venir y servir a esta nación y a su pueblo, contacte nuestra oficina en Israel para obtener más información sobre cómo ser voluntario con VPI. Envíenos un correo electrónico a: info@visionforisrael.co.il.
2. Haciendo Donaciones para Proyectos Específicos — VPI tiene muchos proyectos a los cuales puede donar a 'Ayuda para los Pobres’ o incluso a 'Ayuda Médica y en Caso de Desastre', y mucho más. ¡Eche un vistazo a nuestro sitio web para elegir qué proyecto le gustaría ayudar a apoyar hoy! Y puede hacer clic en AQUÍ para donar.
3. Apoye la Guerra de las Espadas de Hierro — Israel sigue en medio de una guerra, las familias siguen desplazas de sus casas, los soldados todavía están peleando, las familias todavía están separadas, y surgen muchas más necesidades mientras que la guerra continúa. Lea acerca de los esfuerzos de guerra de VPI AQUÍ.
¡Que cada uno de ustedes sea grandemente bendecido por el Señor al elegir bendecir a Israel!